Paseando por el Ebro, en el paraje que llamamos «los tres arbolillos», unos metros más adelante de las Piscinas, nos encontramos con este árbol que no tiene nada de arbolillo.
Para hacernos una idea del tamaño, me coloqué apoyado en él, y casi no me reconozco. ¡Impresionante!
Lo encontrarás en la Etapa LODOSA-MENDAVIA en la Ruta GR99 por el padre Ebro